Como ya sabemos la crisis pegó fuerte al mercado inmobiliario en general y al industrial especialmente. Las cifras del Centro de Información Estadística del Notariado indican que las ventas de naves industriales cayeron un 30% en 2009 respecto el año anterior. Esta tendencia se mantuvo lo que provocó que entre 2008 y 2012 se acumulara una caída del 48%.

Fue a partir de 2013 cuando cambió la tendencia y comenzó un tímido crecimiento, aunque sostenido, que acumuló hasta 2017 una media anual del 13,4%. Ahora bien, en 2017 se vendían en España 1.375 naves menos que en 2008.

Pero la logística, arrastrada por el comercio electrónico, entra de forma definitiva en escena. Así el crecimiento del 27% interanual requiere de centros logísticos y de reparto que deben crecer al mismo ritmo que aumentan las compras por Internet. Sólo en Madrid se contrataron 935.000 m2, el año pasado, para esta actividad.

La compra de espacios de almacenamiento y reparto en grandes ciudades logró un nuevo récord el año pasado con un crecimiento del 2% respecto el año anterior. Las empresas logísticas buscan espacio de forma permanente lo que conllevará un colapso cuando ya no exista más espacio urbano, por lo que hay que encontrar nuevas ubicaciones para este creciente mercado.

Gráfico extraído de STATISTA